Arquitectura: más allá de lo que se cuenta

             

La historia de la arquitectura se considera una subdivisión del arte donde se demuestra la evolución de nuestras infraestructuras, su relación con los seres humanos y el propósito que poseen en el futuro. Esta se fracciona en múltiples etapas que conllevan procesos históricos, culturales y técnicos de la humanidad donde se nos informa sobre las construcciones arquitectónicas tanto antiguas como actuales. Dentro de estas etapas se encuentran las notarías tipologías sobre los fundamentos de la arquitectura a través del tiempo, tales como las cúpulas o las columnas. A pesar de lo mencionado, los relatos otorgados sobre nuestro pasado no son enteramente verídicos ya que la historia ha sido constantemente manipulada por la versión ganadora, por lo que, mucha información ha sido perdida y gran parte de nuestra historia es desconocida. Sin embargo, esta falta de conocimiento no nos detiene para reconocer detalles significativos de nuestro pasado e intentar conseguir esa información que carecemos de nuestra historia.


Las cúpulas han sido uno de los elementos arquitectónicos más revolucionarios en su historia, ya que en el principio las estructuras solo se componían de techos planos y/o triangulares. Las mencionadas fueron utilizadas en los edificios más reconocidos del mundo como símbolos de aspiración espiritual, poder político y función cívica. El Panteón, diseñado por Apolodoro de Damasco, es uno de los edificios más reconocidos, sino el más famoso, donde se puede observar la representación más grande de sus tiempos sobre el poder imperial de la época, al igual que su estructura interior y la magnitud que este edificio presenta. Otras demostraciones de este elemento en infraestructuras reconocidas serían el Capitolio de Estados Unidos, el Taj Mahal en India y Santa Maria del Fiore en Florencia. Cada una de estas edificaciones representa una parte de la historia de la arquitectura que es importante reconocer, una que nos demuestra los hallazgos y retos que tuvieron los pasados arquitectos al momento de innovar su historia, sin embargo, estas grandes estructuras solo están contando el relato del poder, mientras que las reprimidas o cotidianas, cuentan la historia de la comunidad. 


La arquitectura es un arte que responde a las necesidades del ser humano y con esta crea un espacio donde se puedan resolver las mismas, de modo que, conocer esa historia dominada nos beneficia como sociedad para entender los pensamientos del pasado y conocer en enteridad el relato que nos cuentan. Al ocultar la información sobre el lado perjudicado, desperdiciamos comunicación valiosa sobre innovaciones que pudieron haber ejecutado por escasez, representaciones que posiblemente nos pudieran ayudar hoy en día y materiales de los que desconocemos en el presente. Dado que carecemos de información vital, estamos planteando que esta no representa importancia, que solo el vencedor es el que merece ser escuchado, lo cual no puede ser la realidad ya que toda posición al momento de discusión es importante. Al esconder un lado de la historia, nosotros como merecedores de verdad e información íntegra, nos convertimos en ignorantes de nuestro pasado, destinados a cometer los mismos errores que ya se han cometido. De acuerdo a lo mencionado, este conocimiento que carecemos es un dilema para nuestro progreso y una negligencia o egoísmo de nuestros antepasados que nosotros como sociedad debemos renovar. 


Nuestra historia es importante porque nuestro pasado merece ser escuchado y como seres evolutivos, es nuestro deber transformarlo. De la historia de la arquitectura, usualmente se nos presentan conocimientos de la construcción en vez del pensamiento o el proceso que tuvo el arquitecto al momento de ejecutar su diseño, lo cual representa una falta vital de información que nos puede ayudar como futuros arquitectos en el presente. En vez de enseñar a detalle y aprender sobre la causa y efecto que tiene la arquitectura pasada en la sociedad, solo nos mantenemos en la información superficial de nuestra historia. Todo lo mencionado nos demuestra el grave delito que como comunidad estamos cometiendo, por lo que se incita a cambiar los métodos y a recopilar la mayor cantidad de información posible para que terminemos con este recurrente ciclo que llevamos arrastrando de nuestro pasado y así, poder visualizar un futuro progresivo e intelectual.



REFERENCIAS:


https://historia.nationalgeographic.com.es/a/historia-5-mayores-cupulas-mundo_13644

https://www.isado.net/4211-enlaces


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